El correcto uso del péndulo comienza con la forma en que lo sujetas y comprendes sus movimientos. Este proceso implica una serie de pasos para asegurarte de que tu interacción con el péndulo sea precisa y significativa.
1. Posición de la Mano:
- Pulgar e Índice: Sostén el extremo de la cadena del péndulo entre el pulgar y el índice de tu mano dominante. Esto proporciona la mayor estabilidad y control sobre el péndulo.
- Longitud de la Cadena: Deja una longitud suficiente de la cadena para que el péndulo pueda moverse libremente. Generalmente, una longitud de 5 a 10 centímetros es adecuada. Puedes ajustar la longitud según te resulte más cómodo.
2. Estabilidad y Relajación:
- Mano Estable: Mantén tu mano estable. Si necesitas apoyo adicional, puedes apoyar tu codo en una mesa o una superficie plana para evitar movimientos involuntarios.
- Relajación Muscular: Asegúrate de que tu mano esté relajada, sin tensión. La rigidez puede transferirse al péndulo y afectar su movimiento.
3. Postura Corporal:
- Cuerpo Relajado: Siéntate o párate en una postura cómoda y relajada. Evita cualquier tensión en tu cuerpo que pueda influir en los movimientos del péndulo.
- Respiración Controlada: Respira de manera profunda y regular para mantener un estado de calma y concentración.